Saque el mejor provecho a su desayunador
El desayunador se ha convertido en uno de los lugares favoritos del hogar, ya que cumple con una doble función: el disfrute de deliciosos alimentos y la realización de actividades variadas, entre ellas, una zona para preparar y decorar platillos, un espacio para descanso solo o en compañía de los seres queridos, para la lectura, para una sesión de trabajo o estudio, entre otros.
Con el tiempo, este pequeño pero especial espacio multifuncional se ha ido integrando a la decoración del hogar, normalmente en la cocina, sin dejar de lado su confort.
Para conjugar estos importantes aspectos, debe tener presentes cuatro elementos fundamentales en la composición de un desayunador: el mesón, las sillas, la iluminación y la decoración. La incorporación de estos complementos le permitirá sacar el mejor provecho al ambiente.
El mesón
Este es el complemento o barra principal, por esto es fundamental que cuente con las medidas adecuadas, tanto en altura como longitud para poder incluir la cantidad de espacios o sillas necesarias, con el fin de que todos los miembros del hogar puedan disfrutarlo. Este es el primer aspecto a planificar antes de instalar o remozar el desayunador.
En cuanto a los materiales del mesón o barra, dependerá del estilo y decoración de la cocina.
Por ejemplo, un desayunador sencillo y, a la vez, con muy buen estilo lo puede lograr con la instalación de una escuadra plegable de 40 x 40 cm en color blanco, en la pared, a la cual se le agrega un panel de pino de 18 mm en 122 x 240 cm.
Además de un excelente acabado y el uso de materiales de alta calidad, este mesón permite aumentar el espacio y potencial de la estancia de forma sencilla y cuando sea necesario, gracias a su diseño retráctil.
En general, los mesones requieren de ciertos cuidados para mantener su belleza y alargar su vida útil. Por ejemplo, si se van a preparar alimentos sobre él y necesita cortar, es mejor que utilice siempre una tabla de picar.
Para impedir la aparición de grietas u otro tipo de cambios, evite colocar elementos muy calientes sobre la superficie del mesón o ponga con anterioridad un aislante de temperatura.
También es importante el uso de productos de limpieza adecuados para el material de cada mesón. El uso de agua y jabón es recomendable para los distintos materiales.
Todo enser del hogar requiere de un mantenimiento adecuado para conservar su belleza. Para mesones de madera, como en este caso, se puede aplicar aceite hidratante.
Las sillas
De madera, plástico o metal, clásicas o modernas, sobrias y elegantes o de colores llamativos. La variedad de opciones es indiscutible, pero a pesar de esto, cualquier tipo de silla tiene una crucial importancia en cuanto a diseño de interiores.
Para este ambiente, son parte y complemento imprescindible del desayunador.
Antes de la incorporación de las sillas a un desayunador es importante que tome en cuenta que estas deberán ir ligadas a la altura del mesón, al diseño de la estancia, a las necesidades del usuario, la calidad del material, la comodidad que ofrecen y al espacio disponible; por eso su elección nunca debe ser tomada a la ligera. Tómese su tiempo para hacer una inversión acertada.
En el caso de este desayunador se ha optado por un par sillas de ciprés medianas 65 cm, las cuales son muy confortables gracias a su respaldo, cuentan con un estilo clásico pero muy estético y un acabado natural, realzando el toque casero y acogedor que caracteriza a una estancia como la cocina.
Su estilo simple es una gran alternativa, especialmente en espacios compactos, ya que brinda una óptica limpia del espacio y permite una circulación fluida.
La iluminación
La luz es también un factor fundamental en la decoración y el aprovechamiento de las habitaciones o zonas específicas dentro de ellas.
La iluminación hace que una estancia tenga una atmósfera acogedora, brinda la posibilidad de destacar elementos de la decoración y aporta una claridad indiscutiblemente necesaria para desarrollar diferentes actividades. Asimismo, ofrece mayor seguridad al momento de desplazarnos por la habitación.
Para cualquier tipo de cuarto, lo ideal es siempre contar con iluminación natural, por esto se ha colocado el desayunador junto a la ventana y, de esta forma, aprovechar esa fuente de luz. ¿Se imagina disfrutar de un delicioso desayuno, mientras recibe los agradables rayos del sol?
Por supuesto, llega el momento en que se va a requerir la luz artificial, ya sea la luz general ubicada principalmente en el cielo raso, o bien se puede recurrir a la luz puntual o focalizada para iluminar y realzar un objeto o mueble en específico.
Precisamente, para complementar y aprovechar este desayunador por más horas, se ha optado por una lámpara colgante blanca, cuya solución de luminosidad permitirá utilizar la zona también por las noches y, sin dudarlo, atraerá la atención hacia el mueble.
La elección de esta lámpara se basa en la combinación de materiales (metal y madera), además en su estética, su longitud ideal para proporcionar la iluminación adecuada, el tamaño idóneo para el espacio de la estancia, así como la ambientación tenue, de tranquilidad y romántica que aporta.
La decoración
Finalmente, pero igual de importante para lograr una zona de desayunador óptima y agradable a la vista, está la inclusión de elementos ornamentales. En ellos se debe hacer especial énfasis para una elección de artículos adecuados.
En espacios como la cocina, la colocación de elementos como cestas de frutas, flores y plantas son excelentes ideas para complementar el espacio. Por esta razón, se jugó con la incorporación de la canasta millonaria, la cual se ubica específicamente en el desayunador, completando así los cuatro elementos fundamentales y logrando un área armoniosa, multifuncional y estética.
Ya sea la instalación de una nueva estructura o la restauración de su desayunador, tome en cuenta estos aspectos y cree una zona que le sea agradable y le produzca placer al estar en ella.